jueves, 21 de junio de 2007

madrugada

Me levanté hiper temprano pero no aproveché la mañana todo lo que debería. Por que? porque me puse tonta, me eché en el sofá, amanecía sobre los libros y soñé, soñé. Lo que me gusta mi salita no lo sabe nadie... me quedo allí, apenas hay ruido, salvo los pasos del hipopótamo que vive encima, el sol llena esta casa ignorando los edificios de enfrente y todo parece girar muy rápido, todo menos aquí dentro.

Luego: tengo un herpes en el labio superior, mierda. En lo que hay entre el labio y la nariz, esto es, el bigote para los hombres. Pues ahí lo tengo puesto, inmune a las pastillas, permanente. Que se vaya ya, pero tarda, tarda sus días.

Luego de luego: me quedo sin 23 de junio lumínico... Decidí que estaré aquí estudiando, a la luz de la bombilla. Miraré a la luna, también se llega a ella desde la salita, me esperará en cuarto creciente. Y yo te esperaré despierta, busca mi ventana.




No hay comentarios: